Por la blanda arena que lame el mar
Su pequeña huella no vuelve más
Un sendero solo de pena y silencio llegó
Hasta el agua profunda
Un sendero solo de penas mudas llegó
Hasta la espuma
Sabe Dios que angustia te acompañó
Que dolores viejos calló tu voz
Para recostarte arrullada en el canto de las
Caracolas marinas
La canción que canta en el fondo oscuro del mar
La caracola
Te vas Alfonsina con tu soledad
¿Qué poemas nuevos fuiste a buscar?
Una voz antigua de viento y de sal
Te requiebra el alma y la está llevando
Y te vas hacia allá, como en sueños
Dormida, Alfonsina, vestida de mar
Cinco sirenitas te llevarán
Por caminos de algas y de coral
Y fosforescentes caballos marinos harán
Una ronda a tu lado
Y los habitantes del agua van a jugar
Pronto a tu lado
Bájame la lámpara un poco más
Déjame que duerma Nodriza en paz
Y si llama él no le digas que estoy
Dile que Alfonsina no vuelve
Y si llama él no le digas nunca que estoy
Di que me he ido
Te vas Alfonsina con tu soledad
¿Qué poemas nuevos fuiste a buscar?
Una voz antigua de viento y de sal
Te requiebra el alma y la está llevando
Y te vas hacia allá como en sueños
Dormida, Alfonsina, vestida de mar
«Alfonsina y el mar» es una zamba compuesta por el pianista argentino Ariel Ramírez y el escritor Félix Luna, publicada por primera vez en el disco de Mercedes Sosa Mujeres argentinas, de 1969. La canción es un homenaje a la poetisa de la misma nacionalidad Alfonsina Storni, que se suicidó en 1938 en Mar del Plata, saltando al agua desde una escollera, aunque, según la canción, se internó lentamente en el mar. Esta conexión ha originado un rumor muy extendido pero erróneo, según el cual la letra de la canción fue originalmente la carta de suicidio de la poetisa, musicalizada más tarde por los autores de la zamba.
Aunque Ariel Ramírez no conoció directamente a la poetisa, esta fue alumna del padre de Ariel, Zenón Ramírez, que trasmitió a su hijo el drama de Storni. Impresionado por estos recuerdos y por las poesías de Storni, que le trajo Luna, Ramírez compuso la música y Luna aportó después la letra.1
Es una canción muy popular en todo el mundo hispanohablante, que ha sido interpretada por varios cantantes de renombre, entre los que destacan:
- Mirla Castellanos,
- Los Sabandeños,
- Claudia Acuña,
- Chava Alberstein,
- Ainhoa Arteta,
- Sergio Ávila,
- Miguel Bosé,
- Michel Camilo,
- Cristina Branco,
- Soledad Bravo,
- Ane Brun,
- Celeste Carballo,
- Andrés Calamaro,
- Los Chalchaleros,
- Avishai Cohen,
- Alberto Cortez,
- Diego El Cigala,
- Plácido Domingo,
- Lara Fabián,
- Vicente Fernández,
- Francesca Gagnon,
- Lucho Gatica,
- Chabuca Granda,
- Pedro Guerra,
- Inti Illimani,
- María Jiménez,
- Ginamaría Hidalgo,
- Alfredo Kraus,
- Tania Libertad,
- Antonio Machín,
- Mayra Martí,
- Maurane,
- Kaliopi,
- Manuel Mijares,
- Lila Morillo,
- Nana Mouskouri,
- Los Panchos,
- Silvia Pérez Cruz,
- Carlos Portela,
- Danny Rivera,
- Luis Salinas,
- Paloma San Basilio,
- Sergio y Estíbaliz,
- Shakira,
- Franco Simone,
- Mercedes Sosa,
- Patricia Sosa,
- María José Montiel,
- Pasión Vega con José Carreras,
- Los Tucu Tucu,
- Jesus Sevillano,
- Erick Alvarez con Elberth Vargas,
- Los Ángeles Negros,
- Bárbara Padilla
- Rodulfo "Fito" Escobar
- Silvia Perez Cruz
- María José Suárez Castro
FRENTA AL MAR, DE ALFONSINA STORNI (1892-1938) (MODERNISMO ARGENTINO).
Oh mar, enorme mar, corazón fiero
De ritmo desigual, corazón malo,
Yo soy más blanda que ese pobre palo
Que se pudre en tus ondas prisionero.
Oh mar, dame tu cólera tremenda,
Yo me pasé la vida perdonando,
Porque entendía, mar, yo me fui dando:
«Piedad, piedad para el que más ofenda».
Vulgaridad, vulgaridad me acosa.
Ah, me han comprado la ciudad y el hombre.
Hazme tener tu cólera sin nombre:
Ya me fatiga esta misión de rosa.
¿Ves al vulgar? Ese vulgar me apena,
Me falta el aire y donde falta quedo,
Quisiera no entender, pero no puedo:
Es la vulgaridad que me envenena.
Me empobrecí porque entender abruma,
Me empobrecí porque entender sofoca,
¡Bendecida la fuerza de la roca!
Yo tengo el corazón como la espuma.
Mar, yo soñaba ser como tú eres,
Allá en las tardes que la vida mía
Bajo las horas cálidas se abría...
Ah, yo soñaba ser como tú eres.
Mírame aquí, pequeña, miserable,
Todo dolor me vence, todo sueño;
Mar, dame, dame el inefable empeño
De tornarme soberbia, inalcanzable.
Dame tu sal, tu yodo, tu fiereza.
¡Aire de mar!... ¡Oh, tempestad! ¡Oh enojo!
Desdichada de mí, soy un abrojo,
Y muero, mar, sucumbo en mi pobreza.
Y el alma mía es como el mar, es eso,
Ah, la ciudad la pudre y la equivoca;
Pequeña vida que dolor provoca,
¡Que pueda libertarme de su peso!
Vuele mi empeño, mi esperanza vuele...
La vida mía debió ser horrible,
Debió ser una arteria incontenible
Y apenas es cicatriz que siempre duele.
De ritmo desigual, corazón malo,
Yo soy más blanda que ese pobre palo
Que se pudre en tus ondas prisionero.
Oh mar, dame tu cólera tremenda,
Yo me pasé la vida perdonando,
Porque entendía, mar, yo me fui dando:
«Piedad, piedad para el que más ofenda».
Vulgaridad, vulgaridad me acosa.
Ah, me han comprado la ciudad y el hombre.
Hazme tener tu cólera sin nombre:
Ya me fatiga esta misión de rosa.
¿Ves al vulgar? Ese vulgar me apena,
Me falta el aire y donde falta quedo,
Quisiera no entender, pero no puedo:
Es la vulgaridad que me envenena.
Me empobrecí porque entender abruma,
Me empobrecí porque entender sofoca,
¡Bendecida la fuerza de la roca!
Yo tengo el corazón como la espuma.
Mar, yo soñaba ser como tú eres,
Allá en las tardes que la vida mía
Bajo las horas cálidas se abría...
Ah, yo soñaba ser como tú eres.
Mírame aquí, pequeña, miserable,
Todo dolor me vence, todo sueño;
Mar, dame, dame el inefable empeño
De tornarme soberbia, inalcanzable.
Dame tu sal, tu yodo, tu fiereza.
¡Aire de mar!... ¡Oh, tempestad! ¡Oh enojo!
Desdichada de mí, soy un abrojo,
Y muero, mar, sucumbo en mi pobreza.
Y el alma mía es como el mar, es eso,
Ah, la ciudad la pudre y la equivoca;
Pequeña vida que dolor provoca,
¡Que pueda libertarme de su peso!
Vuele mi empeño, mi esperanza vuele...
La vida mía debió ser horrible,
Debió ser una arteria incontenible
Y apenas es cicatriz que siempre duele.