"La Parrilla de León" hace comentario de mi poema:
UN GARBANZO NEGRO
Yo no
sabía que era negro hasta que
mis
hermanos blancos me lo dijeron,
no, no lo
sabía, me había criado con ellos,
crecimos
alegres y felices
en los
páramos soleado de Castilla
allá muy
lejos, donde hace frío,
donde
escarcha el cielo, donde nadie te visita,
si no es
que estás muy enfermo.
Ahora, ya sé que soy un garbanzo negro,
solitario
y sin familia que no te echan de menos,
voy por
los caminos buscando aliento,
compañía,
conversación y alimento,
pero no lo
encuentro, sigo solo y sin que me quieran
porque soy
negro, negro y además pequeño.
No me quieren ni para el puchero
porque
tengo poca cuerpo,
me llaman
el “Chato negro”,
porque
nariz no tengo, pero no desespero
algún día
encontraré a alguien que me quiera
por mi
color y mi poco sustento.
Ahora voy camino de Granada
porque me
han contado que allí, en la vega,
hacen un
puchero muy rico
con su
tocino y su hueso, donde todos,
todos los
garbanzos son negros.
Ramón Fernández Palmeral