POESIA PALMERIANA

Los poetas somos como los leones, después de que nos disparen podemos lanzar nuestras garras. Página administrada por el poeta Ramón Palmeral, Alicante (España). Publicamos gratis portadas de los libros que nos envían. El mejor portal de poetas hispanoamericanos seleccionados. Ramón Palmeral poeta de Ciudad Real, nacido en Piedrabuena.
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La mayor satifacción que tengo al escribir es saber que alguien me lea cuando yo esté muerto.

miércoles, 21 de abril de 2021

Novela corta política: "El jinete alcoyano" 1873 en Alcoy. Leer gratis en CALAMEO y PDF

 

                                       (Portada del libro, solamente en Calameo digital)

Pinchar en CALAMEO para leer gratis la novela corta "El jinete alcoyano" 1873 en Alcoy. durante la llamada guerra o revolución  de "Petroli"

 de Ramón Fernánde Palmeral 1992

El personaje es un revolucionario anarquista se habla de República como medio de gobierno:

https://es.calameo.com/read/0049883283b8f07bbdaf9

Leer en PDF en la siguiente dirección:

 https://docs.google.com/document/d/15tvWZRYfQKwykG4usN0UgLM3-DFXcDsa/edit

 

                      

INTRODUCCIÓN

                      

        En 1983  con motivo de las obras de remodelación del edificio de los antiguos Juzgados de Madrid, se procedió al  traslado y limpieza de los archivos cuyo volumen ocuparía una plaza de toros. Casi todos los legajos acabaron quemados en un basurero de Navalcarnero, salvo algunos sumarios indultados, supongo, por interés casuístico de la criminología o la celebridad de sus inculpados.  La verdad es que legajos, fichas, papeles, cajones y cuando objetos pueden guardar un viejo archivo, se encontraban atacados por la inapelable sentencia de la humedad, la invisible  polilla o la deformación de un nuevo cambio, o  tiempo político democrático.

       Consumada la  incineración en Navalcarnero,  me acerqué al basurero para rebuscar, confiando en mi olfato de perro perdiguero, y pude hallar  montañas de papeles quemados y otros papeles a medio quemar que volaban entre bolsas de plástico. Con una vara de olivo estuve hurgando en la hedienta basura hasta que descubrí un cajón de madera con fichas a los que no le había alcanzado el fuego, entre ellas había dos libretas de pasta gruesa de una raya escrita a mano con una diminuta letra de clara caligrafía, pero tenía un problema porque  estaba escrito en valenciano; no obstante me lo guardé.

       En 1990 llegué a Alicante por razones de mi nuevo destino, volví a ordenar mi biblioteca y allí estaban las libretas cuyo contenido no podía entender. Un día, como el que no quiere la cosa, se lo enseñé a un vecino que habla y escribe el valenciano, y me dijo con cierto asombro que tenía en mi poder una historia sobre un anarquista ejecutado en 1875 a garrote vil.  Me despertó la curiosidad, así que con mucha dedicación y tiempo más el auxilio del Diccionario Tabarca, he traducido las libretas, que componen este libro que, ha quedado como una trágica historia naturalista al más puro estilo de griego, como un Zola o un Vicente Blasco Ibáñez. En honor a la verdad, he de advertir que la traducción no es literal, tampoco es muy buena, lo siento,  he aportado lo que sé de mis  conocimientos de sintaxis, que no son muchos. ¿A lo mejor lo he estropeado?, he de reconocer que no soy ni un erudito ni un novelista, más bien un curioso impertinente.

      He respetado la  historia de Severiano Albarrana (nombre supuesto) alias Jinete, aunque parezca algo folletinesca en algunas partes, además la cuestión del anarquismo suena hoy día así, como muy fuerte, como demasiado rotundo, y nada recomendable para los demócratas,  pero qué le vamos a hacer, así se escribió la historia, yo no soy el padre de la criatura.   Las libretas carecían de un título, a mí me ha parecido oportuno bautizar la historia con el pintoresco título de “El Jinete Alcoyano”, por los saltos que da su vida del autor de los manuscritos.

 

Descubridor y editor del manuscrito

Ramón Fernández, 1992

 

                    


 

 

  

                                                       1      

 

       

               SOBRE FINALES DE NOVIEMBRE DE 1873

 

        Bons dies. Un exceso de mano de obra barata en la industria papelera y textil de la ciudad del Serpi propició el abuso de la casta con despidos caprichosos y arbitrarios, es decir, de los amos, señores caciquiles y empresarios, carente de legislación laboral; por eso, por pura necesidad de ayudar a los trabajadores establecimos en esta ciudad industrial la sede del Comisión Federal de la Regional Española desde finales de 1872... (sigue en el libro de Calameo)