Leer el comentario en Hoja del lunes de Alicante, de 18-04-22
Decía un profesor mío sobre la historia de la novela que el lector se ha de confabular o conspirar junto al autor de una novela, es decir, creerse los artificios que emplea el autor emplea o usa el narrador para exponer su tesis narrativa. De lo contrario hay ni lector ni autor.
Dicho lo cual, aviso al lector que no se va a aburrir, puesto que además va a aprender muchos términos técnicos marinos, nombres de personajes y anécdotas reales que no vienen en los libros de Historia o, por otra parte, ya no se estudian, se olvidan o no sabemos, que es lo más frecuente. Los que estamos orgullosos de nuestro pasado, es decir, de nuestro glorioso Imperio Español, el libro de Calvet nos satisfará y nos enriquecerá.
Ramón Palmeral